Menú

domingo, 21 de septiembre de 2025

Relectura del libro "Tres deseos: una novela mágica" (2010) de Jackson Pearce

Calificación: 5’5/10

Aprovechando que había decidido releerme el divertido Magia de una noche de verano después de tantos años, decidí releer también algún otro libro suelto que hubiese leído en mi adolescencia y no hubiese vuelto a leer después. Opté por Tres deseos y Ex libris, del cual hablaré en mi próxima reseña.

Al igual que de los demás, no recordaba gran cosa de Tres deseos, aunque quizá sí tenía un poquito más claro el argumento. Sinceramente, todos mis recuerdos se ceñían a que la protagonista había estado saliendo con un chico que resultó ser gay y que un genio aparece en su vida para concederle tres deseos y ¡oh, qué inesperado! encuentra en él al verdadero amor de su vida.

Algo que me ha llamado la atención desde el primer momento y que sin duda no recordaba (supongo que no le daba tanta importancia a eso en aquel entonces) es que el libro no está particularmente bien escrito. No digo que la prosa de la narradora no sea suficiente o decente, pero desde luego distaría mucho de poder ser considerada alta literatura. No puedo evitar pensar en las historias que escritores amateurs escriben en Wattpad y que terminan siendo publicadas (yo hasta ahora no le leído ninguna, que conste, aunque no me cierro a ello en el futuro).

Aparte de la propia prosa otros detalles en los que esto se notaba era, por ejemplo, en un abuso de repeticiones de ideas ya explicadas, lo cual resulta innecesario. Ya nos había quedado clarísimo que Viola se sentía marginada socialmente y fuera de lugar en cualquier grupo, no hacía falta que ahondasen en la misma idea una y otra vez en cada capítulo y utilizando siempre las mismas expresiones (como “formar parte de algo”, tendría que haber contado el número de veces que se repitió). Obviamente empatizo muchísimo con ella al respecto porque sé de primera mano lo horrible que es sentirse así, pero es que tanto Viola como la autora se ponían muy pesadas repitiendo la misma idea constantemente. Y el hecho de que se sienta así tampoco justifica por ejemplo, la forma en la que se portó con Lawrence cuando él fue a recogerla en coche al cine, sin ni siquiera tener por qué hacerlo.

Por otra parte, los personajes son bastante planos y arquetípicos y no ofrecen un convincente desarrollo o evolución con unos tiempos realistas, por ejemplo el propio Genio. No tiene la carisma y personalidad de otros personajes masculinos de este tipo de novelas y su cambio de mentalidad sobre los humanos y la mortalidad es exageradamente abrupto para resultar creíble. La autora también desperdició la oportunidad de que Viola le asignara un nombre humano como Gene, que no solo sí existe si no que se parece mucho tanto gráfica como fonológicamente a “genie”, genio en inglés.

[SPOILER: Para terminar, algo particularmente decepcionante son los tres deseos pedidos por Viola. Una espera que siendo la protagonista desee algo especialmente destacable o importante para la historia. El primer deseo, si bien no llegó a formularse expresamente, sí es coherente y lógico con ella como personaje y sus inseguridades e inquietudes, pero resulta enormemente decepcionante que los otros dos fuesen tan “flojos” y debidos a la presión del ifrit respecto a temas específicos en lugar de a verdaderos deseos que ella hubiese sentido desde antes y que no se debieran simplemente a la presión del momento. De hecho, me resulta curioso que yo tenía la vaga idea de que el último deseo pedido por Viola era liberar a genio de su trabajo como ser que concede deseos o hacerle humano para que pudiese estar con ella, y me sorprendió que este deseo nunca se llevara a cabo. ¿Quizá en su momento también me decepcionaron tanto sus deseos pedidos que en mi imaginación cambié el último por uno que me hubiese parecido más pertinente y por eso me había quedado esa idea en la cabeza asociada a este libro?]

De todas formas, aunque sea una lectura que pasa sin pena ni gloria por mí, me ha vuelto a gustar y tampoco se pierde nada leyéndolo, siempre que se haga con una mentalidad abierta de que se está leyendo una novela adolescente particularmente floja para pasar el rato y no una de las que, aunque juveniles, tienen muchísima calidad y dejan huella.


Fuente de la imagen:

https://www.casadellibro.com/libro-tres-deseos-una-novela-magica/9788427200272/1697911

Relectura de "Magia de una noche de verano" (2009) de Maite Carranza

 

Calificación: 7/10

Al limpiar y reorganizar mis estanterías reparé en que llevaba muchos años sin releer este libro a pesar de haberme sido regalada una edición de segunda mano hace pocos años, así que, aprovechando que aún estábamos en verano (en honor al título), decidí releerlo antes de que este terminara.

Leí este libro de adolescente porque me lo recomendó mi amiga de aquel entonces. Recuerdo que, aun sin ser uno de mis preferidos, me gustó bastante y me hizo reír. Ese era mi recuerdo sobre él, que era un libro divertido que te sacaba alguna sonrisa. Evidentemente no recordaba nada específico que me hiciera reír en su momento, pero sí me sonaba algo sobre un diálogo en el que se menciona una pistola (al releerlo me di cuenta de que es la parte en la que CC le pregunta a Marina con qué mano dispararía una pistola porque resulta que ella es ambidiestra).

De la trama no recordaba nada salvo que la historia versaba sobre dos hermanas, una de ellas llamada Ángela, que era como Doña Perfecta en todo, y la otra hermana que estaba acomplejada por ser peor que ella en todo.

Releyéndolo ahora de mayor estoy apreciando que está bastante bien escrito. Maite tiene una prosa bastante inteligente y cuidada. No en un sentido pedante y rimbombante (aunque tiene sus momentos poéticos), sino ingenioso y astuto.

Los capítulos son cortos y cada uno lo protagoniza un personaje, pero evidentemente predominan los de Marina. Es ameno y entretenido, pero reconozco que cuando alguno de los capítulos no versaba sobre las protagonistas lo empiezaba con un interés muy limitado.

Si hay algo de lo que el libro adolece es de no ofrecer suficiente contexto sobre ciertos personajes. Por ejemplo, la figura del caballero oscuro quedó muy poco clara y perfilada. ¿Era malo o bueno? ¿De dónde había salido? ¿Tenía relación con la familia real?

En cambio, se ofrece excesivo contexto sobre el linaje de esas tierras y los antepasados de la familia real sin tener la más mínima relevancia para la historia. Admito que esos pasajes se me hacían un poco densos.

Marina la verdad es que no me cae demasiado bien. Aunque la comprendo y empatizo con la frustración de no ser lo suficientemente buena en nada y salir siempre perdiendo en las comparaciones, tiende a ser demasiado borde y brusca y se porta muy mal con CC y con Luci. A veces llega a ser realmente cruel. Aunque sí quería que Marina y CC terminaran juntos, no son una pareja que me encante, no se me han metido en el corazón como otros. Ella es un borde y él carece de encanto y carisma masculina.

[SPOILERS: Ángela me cayó bien por muy doña perfecta que fuera durante todo el libro, ya que me parecía buena persona, aunque yo también le tendría manía si fuera su hermana. Sin embargo, al final del libro da un giro según a Marina se le cae la venda de los ojos con ella y se nos ofrece una visión muy distinta (algo forzada) acerca de cómo es Ángela realmente. En la conclusión te hacen ver que Ángela es una creída y una egocéntrica, que no lo parecía al principio, pero parece un poco sacado de la manga. ¿No es extraño que si realmente es de esa manera nadie más la hubiese calado? Hubiese esperado algún tipo de explicación mágica acerca de por qué todo el mundo bebe los vientos por ella, como que las hadas la hubiesen bendecido con un encantamiento que hace que encandile a todo el que la conozca, pero no se aclara nada al respecto y la alterativa de que simplemente sea tan perfecta porque sí y caiga bien a absolutamente todo el mundo no me resulta realista. Al terminar la historia pensé que por una parte es una pena que Ángela y la madre no se disculparan con Marina y siguieran tratándola mal, pero supongo que la historia es mucho más realista así.

Un personaje cuyas acciones no puedo justificar es Lilian. No me gustaba su actitud con Marina y que la engañara para conducirla a su perdición (que la arrojaran al pozo). Que quisiera proteger a Ángela no exculpa que tratara de condenar la vida de otra inocente.

Por otra parte, reconozco que no vi venir que Antaviana fuera la niña de Lilian, y considero que tendrían que haber explicado algo más sobre ello o donde estuvo todo este tiempo, porque no se ofrece contexto sobre ese personaje ni explican cómo fue a parar con las hadas, cómo escapó de los trasgos o por qué es tan mala. Sinceramente, no sé por qué Lilian la quería tanto.]

 

Por supuesto me ha gustado y me ha entretenido aunque reconozco que no me he partido de risa en voz alta, aunque sí me reía internamente de vez en cuando y aunque lo recomiendo mucho, no lo considero de mis favoritos. Es divertido, pero no es adictivo, no te impulsa a seguir leyendo y no me importaba terminarlo. Quizá en parte el hecho de que cada capítulo esté narrado por un personaje rompe un poco el ritmo o la inercia y te saca un poco de lo que estabas leyendo.

No obstante, aunque pueda parecer una historia infantil, debido a su humor creo que un adulto la puede disfrutar perfectamente y reírse.

 

Fuente de la imagen:

https://www.casadellibro.com/libro-magia-de-una-noche-de-verano/9788423694112/1250943