¡Hola a todos, he vuelto!
Antes que nada, quiero disculparme por llevar más de dos meses sin publicar nada, pero mi tiempo libre se ha visto reducido al mínimo al emprender la recta final de mi máster.
Esta reseña la tenía escrita desde principios de
mayo, pero, por razones de tiempo, no he podido subirla hasta ahora. Mis más
sinceras disculpas por parte de esta universitaria estresada. A continuación reproduzco el mencionado comentario que guardaba sin publicar sobre los cuatro siguientes capítulos de Sakura Clear Card Arc:
----
Dado que el capítulo 12 ha sido, por razones
románticas que inmiscuyen a mi pareja favorita de la historia, el mejor hasta
ahora, la mayor parte de lo que voy a comentar se referirá a dicho capítulo.
La captura de las cartas cada vez me parece más
aburrida, monótona y simplona, rayando a veces en la absurdez, como en este
caso. ¿En serio, solo con liberar la llave la nueva carta ya se expuso
dócilmente para ser atrapada? También me flipa la pasividad y pocas luces de
las protas, Sakura y Tomoyo. ¿Cómo puede ser que no se den cuenta de los
parecidos entre el libro de Akiho y el de las cartas de Clow/Sakura? ¿Cómo a
estas alturas no recelan con cada nueva aparición o nuevo alumno que llega a
Tomoeda? Ya deberían estar escarmentadas, pues siempre que ha aparecido un
nuevo personaje en la historia original ha traído consigo misterios o
problemas.
Las Clamp vuelven a repetir patrones al presentar a esta nueva alumna enamorada de un chico mayor que ella, su mayordomo. Siento recordaros,
Clamp, que esa historia ya la vimos con Rika y el profesor Terada en su
momento, por lo que ya no resulta ni innovador ni transgresor. Ni siquiera es
algo que se hayan limitado a sugerir o insinuar sibilinamente, sino que, ante
la abundancia de planos de miradas cómplices entre ellos e instantes de sonrojo
por parte de ella, sobran las palabras.
Por otra parte, he de comentar que, si bien al
principio gustaba y hacía gracia volver a ver los “vicios” y manías típicos de
cada personaje, a estas alturas ya empiezan a ser cansino ver las ansias de
Tomoyo de grabar a Sakura en cada momento o las ganas de Kero de ser grabado
constantemente. Cuando se incurre en la reiteración estos detalles dejan de
tener tanta gracia. De hecho, me hace más gracia ver las caras del impávido Yue
ante el entusiasmo de Kero.
Sin duda, lo mejor del capítulo 12 ha sido, como
no podía ser de otra manera, la escena entre Sakura y Shaoran. Y ahora puedo
decir que al fin hemos tenido una escena decente entre ellos dos. Su relación
avanza endiabladamente lenta, y en esta escena no han dado lugar a un avance
significativo, salvo el hecho de que Sakura haya invitado a Shaoran al festival
constituye una especie de primera cita entre ellos. Una lástima que una cita
tan bonita sea tan bruscamente interrumpida por otra inoportuna carta, justo
cuando Sakura deseaba que ese momento no acabara nunca.
Siento curiosidad por ver si, ante la interrupción
de su momento a cuenta de una nueva carta, Shaoran ayudará o no a Sakura a
capturarla. La mayoría de las veces anteriores en las que ella tuvo que hacer
una captura, su churri, ¡vaya casualidad!, no estaba presente —salvo en el
capítulo 10, donde la verdad es que sí la ayudó—, lo que aumentaba las
sospechas de los fans de que él podía tener algo que ver o estar involucrado de
tal manera en el asunto como para decidir —por ejemplo—, que es necesario que
Sakura las capture por su cuenta. En el siguiente número podremos —espero—
despejar algo nuestras dudas al respecto en función de cómo actúe Shaoran ante
esa situación.
En el capítulo también hemos podido ver cómo
Shaoran y Eriol no son los únicos que le están ocultando algo a Sakura, pues Touya
también parece estarle escondiendo algo. No hace falta decir lo cansino y
enervante que resulta eso, pues los lectores, si bien no sabemos tan poco como
la propia Sakura (pues nosotros si sospechamos de esos tres personajes a cuenta
de ciertos planos y conversaciones en lo que ella no repara o no está
presente), lo cierto es que tampoco sabemos mucho más.
También me ha alegrado que este capítulo se
centrara en los personajes principales, pues, aunque agrade ver a los
secundarios porque, de lo contrario, se les echa de menos; prefiero que estos
no resten protagonismo a aquellos de los que depende el avance de la trama, y
más teniendo en cuenta lo cortos que son los capítulos y lo que tienden a
entretenerse las autoras en cosas secundarias e irrelevantes en esta nueva
historia.
Del duodécimo capítulo me ciño a comentar lo
arriba expuesto porque, seamos sinceros, ¿a quién le importa el principio del
capítulo, con Sakura atrapando una nueva carta en la biblioteca de Akiho,
teniendo después semejantes momentos entre Sakura y Shaoran? Eso es lo
verdaderamente interesante para los fans, y, por tanto, lo que las Clamp se
están empeñando en ralentizar hasta límites irritantes. No hace falta decir que
sigo sin fiarme ni un pelo de Akiho. ¡Por favor, si hasta vive en la antigua
casa de Eriol! Blanco y en botella.
Por último, tengo que comentar mi hastío ante el
hecho de que al final del último capítulo se anunciara un parón de dos meses,
por lo que el próximo capítulo no saldrá hasta julio. Me parece increíble que
con lo cortos e insustanciales que son los capítulos se permitan el lujo de
hacernos esperar el doble por el próximo. Más les vale volver con algo jugoso y
que suponga un notable esclarecimiento del misterio principal.
Fuentes de las imágenes:
https://3.bp.blogspot.com/-VO3rOAFruZM/WRFFccD2laI/AAAAAAADH5U/YfVLlOFD-WY0b55Y5nu9CrVdXuwo_rAGQCLcB/s0/Kokoro_no_clamp_CCS_Clear_Card_Hen_Cap%25C3%25ADtulo_12_P%25C3%25A1gina_00.png
No hay comentarios:
Publicar un comentario