Por fin llegó, el
esperadísimo sexto álbum de estudio de Little Mix y el primero bajo su nuevo
sello discográfico RCA, libres al fin de la dictadura de Syco. Se ha hecho
esperar más de la cuenta debido a la maldita pandemia de COVID19, que paralizó
las grabaciones y toda promoción previa a su lanzamiento, a pesar de que,
afortunadamente, el grueso del disco lo tenían ya grabado de antes. Ha sido un
disco del que durante mucho tiempo solo se supo que era una colección de hits pop fiesteros y bailables, ideales
para levantar los ánimos ante esta situación. Pero ni ellas parecían saber qué
canciones pasarían finalmente el corte y cuáles no, porque en entrevistas de
este verano avivaron rumores sobre varias colaboraciones con otros artistas,
algo que al final no ha sido así, incluso creo recordar que hablaron de alguna
canción a cappella que no ha podido
llegar hasta nosotros porque no se les permiría grabar las armonías a las
cuatro en un mismo estudio sin estar separadas por una distancia de seguridad
(maldito coronavirus de las narices, la de problemas que está ocasionando).
Debido a todo esto,
habrá quienes piensen que Confetti ha
resultado ser solo una sombra de lo que podía haber sido, pero afortunadamente,
para mí no es así y me doy por muy satisfecha con el álbum que nos han
ofrecido. Si es cierto que he echado de menos esa supuesta canción a cappella y alguna otra balada (aunque la
que tenemos vale por muchas), y la voz de Perrie me ha sonado por debajo de sus
posibilidades (ninguna high note icónica
o al menos un solo tan épico como con el que comienza Power). Y ya no de ella,
es que no tenemos high notes ni de
las demás salvo ciertos amagos o pequeñas excepciones. Y ya no digamos un rap
por parte de Leigh-Anne que ya estoy cansada de pedir y que ya me he
mentalizado que no va a ocurrir de nuevo.
También aprecio otros
defectos como una ordenación de las canciones un tanto extraña (¿por qué tantas
empezadas por Jesy o Perrie seguidas en lugar de intercalarlas como hacían
antes?) y en ocasiones un reparto un tanto injusto de las partes (poca Jesy en
Gloves up y A mess, poca Leigh en Sweet Melody). Y algo que me frustra y
desconcierta: ¿Por qué diantres son tan cortas todas las canciones? Es algo que
sale mucho de ojo, la mayoría no llegan ni a los 3 minutos de duración. Muchas prescinden
de un puente y último estribillo cuando es algo de lo más normal en la música
de hoy en día y ni siquiera tienen la excusa de ser canciones lo suficientemente
largas. Muchas te dejan con ganas de más o saben a poco porque salta a la vista
que son más cortas de lo normal.
Por el lado
contrario, no me esperaba que todas las canciones me fueran a gustar tanto, y
sobre todo, que me fueran a gustar desde el principio. Es el primer disco de
Little Mix (y uno de los muy pocos en general) en el que ninguna canción me
desagrada o podría considerarla un skip. Y
eso también se traduce en que no hay tanta diferencia como de costumbre entre
las que me gustan más y menos, hasta el punto en el que ha sido más ardua de lo
normal para mí la tarea de puntuarlas y elaborar un ranking de favoritas. No me esperaba que su sexto álbum de estudio fuera
a hacer genuinos amagos de desplazar a LM5
o a Get Weird en los tercer y segundo
puesto —respectivamente— de los que para mí son los mejores discos de Little
Mix. No sé en qué quedará la cosa, porque jerarquizarlos por orden de
preferencia cada vez me resulta más duro. Salute
siempre ocupará el primer puesto, eso sí.
Por otra parte, si
antes he hablado del decepionante despliegue vocal de Perrie, Jesy y Leigh-Anne
en este disco, he de admitir justo lo contrario en el caso de Jade. Su voz es,
sin duda, la que más me ha sorprendido en este disco. Ha demostrado un dominio sobre
los graves inaudito en ella —en el primer estribillo de My love won’t let you
down y de Rendezvous—, ha hecho las delicias de esta oyente con sus dulces y
angelicales falsetes alargándolos más de lo acostumbrado al cantar con su voz
de cabeza sus solos completos —como en el estribillo de Nothing but my feelings
o los pre-estribillos de A mess— y ha hecho amagos de high notes y rasgado su voz en growls
—en Break up song y If you want my love—. Tenía dudas al principio, pero creo
que podría afirmar que este es SU disco. Y yo no podía estar más contenta,
porque veía a Jade un tanto relegada en anteriores trabajos y yo esperaba
deseosa su momento de brillar.
Para terminar, antes
de pasar a la clasificación y el ranking, terminaré con un tema mucho más
amargo. Estoy realmente aterrada por lo que está ocurriendo con Jesy. Los rumores
iniciales de ella abandonando el grupo a finales de octubre me parecieron
tonterías sin base ni fundamento, pero eso era porque ella aún no se había
tomado este descanso prolongado que está durando más de lo previsto. Ella nunca
había hecho esto. Su depresión la ha hecho atravesar por momentos delicados
muchas veces, pero nunca había llegado al punto de apartarla de la banda de
esta manera. Está completamente caída en combate. No da señales de vida alguna
ni está participando en modo alguno en la promoción del álbum. Y todo sin explicaciones
que yo creo que los fans merecemos. Porque no saber qué ha pasado, esa
incertidumbre, causa mucho más sufrimiento, al conducirnos a pensar en
terroríficas posibilidades como un nuevo intento de suicidio por su parte.
Aunque eche de menos
sus publicaciones en redes sociales, su aparición en entrevistas o directos de
Instagram, su participación en la promoción del disco y esté muy preocupada por
su salud mental, nada es comparable al vacío que siento dentro cada vez que veo
a sus compañeras actuar sobre el escenario sin ella. Es como si fueran Little
Mix sin serlo realmente. No es lo mismo. Esos momentos me generan unos atisbos
de ansiedad que van creciendo según me pongo a pensar en cuánto va a alargarse
esta situación. Si pienso que por enero deberían estar sacando un nuevo vídeo
en el que ella no va a estar. Si pienso que en abril comienzan gira y ella
quizá no va a estar allí. Pero sobre todo, si pienso en las repetidas afirmaciones
que ellas siempre han hecho de que el grupo nunca continuaría sin una de ellas.
Pensar en esa afirmación me aterroriza, porque eso significa que si Jesy no progresa
y decide abandonar sería el fin de Little Mix. Y yo no estoy preparada para que
ese momento llegue. Los mixers
llevamos años congratulándonos de apoyar al grupo de chicas que más tiempo ha
durado sin separarse (nada más y nada menos que una década). Así que, por
favor, no lo estropeéis ahora.
Puntuación
y opinión sobre cada canción:
Break
up song (8/10. 4 de 5 estrellas): fue el primer single,
lanzado en pleno inicio de la pandemia. Es tremendamente pegadiza. Días antes
de su lanzamiento subieron la parte del estribillo a Tik Tok y con escucharlo
unas pocas veces ya me sabía la melodía de memoria y no me la quitaba de la
cabeza. Sentía que me sabía la canción sin siquiera haberla escuchado entera. Me
entró tan fácilmente desde el principio (le di un 7’5 de nota en la primera
escucha) que pensé que me iba a cansar rápido, pero me sigue gustando. Es
alegre y ochentera (lo de ochentera no me salió a mí de ojo, es que lo dice
todo el mundo, aunque yo no lo note especialmente). Mi parte preferida, aparte
del estribillo, es el puente a cargo de Jade, sobre todo la parte en la que su
voz hace un sexy growl al cantar el verso «for all the tears that I cried». Lo peor de este primer single fue que
al estar ellas confinadas no pudieron reunirse en un estudio para grabar un
vídeo decente y, en consecuencia, nos tuvimos que conformar con uno
decepcionante en el que ellas eran emuladas por chapuceros dibujos animados.
Holiday
(7’5/10. 3’5 de 5 estrellas): segundo single. Muy
veraniego. Es menos pegadiza que la anterior, quizá porque es mucho más chill, sin un estribillo explosivo. Precisamente por esa razón fue que,
cuando publicaron ese fragmento como anticipo en Tik Tok, confundí esa parte
con un simple pre-estribillo. En un principio dicho estribillo a cargo de Jade
no me convencía, aunque para cuando estaba terminando la canción ya me había
atrapado. El post-estribillo de Perrie, por su parte, entra muy rápido. Son mis
dos partes preferidas de la canción. Olvidé apuntarlo en su momento, pero creo
que en la primera escucha le hubiera dado en torno a un 8 de nota. En sus
primeros días casi me gustaba más que Break up song. He de mencionar que fue
estrenada el 24 de julio, el mismo día que Folklore,
el disco sorpresa de Taylor Swift, y a pesar de que esto último era (como acontecimiento)
más importante para mí, Holiday me gustó muchísimo más que todo Folklore entero.
Sweet
melody (7’5/10. 3’5 de 5 estrellas): tercer single. Tremendamente
pegadiza, la que más de todo el álbum. Si la escuchas, se te queda rayándote la
cabeza durante horas el estribillo, que es muchísimo mejor que las estrofas y
donde reside la fuerza de la canción. Cuando lanzaron los primeros snippets no pensé que me fuera a gustar
porque el beat es un tanto
electrónico. La primera vez que la escuché me quedé un poco fría (le di un 6’5
de nota), pero pronto empezó a atraparme. Para mi gusto Leigh-Anne canta
demasiado poco aunque su parte es muy bonita y su voz suena muy angelical. Los dos
primeros singles me gustan un poco más que esta, al parecer justo al contrario
que al resto del fandom, que siempre
parece empeñado en llevarme la contraria. Espero que no se retrase el día en el
que podamos ver a las cuatro cantando esta canción, y no solo Perrie, Jade y
Leigh ante la prolongada ausencia de Jesy.
Confetti
(6’5/10. 3 de 5 estrellas): Sin ser ningún temazo, acaba
enganchando bastante más de lo que esperarías al principio. La primera escucha
me dejó muy fría y le di un 6. Esperaba un temazo pop con estribillo potente, a
fin de cuentas, es la canción que da nombre al álbum. El estribillo me pareció
demasiado chill y la canción en sí
más electrónica que las otras, más trap. No obstante, en la segunda y tercera escucha
ya me gustó bastante más y sin ser de las más pegadizas del álbum, sí lo es
bastante. Mi parte favorita es el estribillo y el pre-estribillo de Leigh-Anne.
Happiness
(8’5/10. 4’5 de 5 estrellas): ME ENCANTA. Mi
favorita del álbum y de las más pegadizas. En la primera escucha no me fascinó,
pero me gustó (le di un 8), aunque eché en falta una nota alta de Perrie antes
del último estribillo, pues parecía que la requería la canción y hubiera
encajado muy bien. Mi parte favorita son los estribillos. Tiene mucho potencial
de single, pero estoy segura de que no lo va a ser, a fin de cuentas, ya ha
sido single promocional.
Not a pop song (6’5. 3 de 5 estrellas):
tenía potencial para ser más de lo que ha sido, es muy simple y sencilla. Lo
que más me gusta es que es la menos electrónica, la más pop tradicional, con
guitarra acústica y todo. Mi parte favorita es el estribillo cantado solo por
Jade. La letra podía haber sido más shady
de lo que es, me gustaría que hubieran sido aún más críticas y explícitas con
su anterior discográfica y con Simon Cowell, que es a quienes se dirige la
canción. En ella se rebelan contra su yugo, por fin libres de ellos y de las
cortapisas que les ponían. Lejos de tener libertad creativa, Little Mix se
veían presionadas para ser el producto de mercado que ellos querían que fueran
y no quienes ellas realmente querían ser. En la primera escucha le di un: 7. Actualmente
es de las que menos me gustan del disco.
Nothing but my feelings
(6’5/10. 3
de 5 estrellas): Empieza muy bien pero decae en cuando
entra el beat electrónico que
acompaña a las estrofas, que me recuerdan un poco a alguna canción de Demi
Lovato. Agradezco que, aunque parezca que en todos sus álbumes tenga que haber
alguna canción sobre sexo, esta vez se hayan cortado bastante y no hayan sido
tan explicitas como en otras ocasiones. Echo en falta algún puente. Lo mejor es
el estribillo, sobre todo el de Jade del comienzo —debido a la dulzura de su
voz— y el de todas juntas. Es una de las muy pocas canciones de este disco en
las que no cantan juntas en todos los estribillos. En la primera escucha le di
un: 6’5.
Gloves
up (7’5/10. 3’5/5): la primera vez que la escuché quizá
fue de las que menos me gustó (le di un: 6’5), la veía un poco demasiado
electrónica. Se asimila un poco al estilo del grupo de K-Pop coreano Blackpink.
Me recordaba a un combate en un ring, y luego me enteré de que esa era la idea
tras toda la canción. El estribillo me sorprendió para bien, suena realmente
poderoso. El primero de ellos, el cantado por Perrie, es mi parte favorita de
toda la canción. He leído a gente comentando —incluidas ellas mismas— que el
estribillo recuerda mucho a la cantante Sia —especialmente el de Leigh—, y lo
cierto es que tienen mucha razón. Jesy canta demasiado poco para mi gusto y la
canción es demasiado corta, yo le hubiera añadido un tercer estribillo, cantado
por Jade o por todas juntas. La parte post-estribillo no me convencía al
principio, pero me pasó lo mismo que con el drop
beat de Power: al principio me parecía que estropeaba la canción y después
me di cuenta de que le añadía fuerza a esta. Me recuerda bastante a esta
canción, aunque menos mítica y feminista.
A
Mess (Happy 4 u) (7/10. 3’5 de 5 estrellas): En la primera
escucha le di un: 6’5 y me decepcionó un poco el estribillo, pero no está mal.
Me sorprende mucho el puente de Jesy, no pega y pilla desprevenido, pero mola. Lo
más bonito, aparte del post-estribillo, es el pre-estribillo de Jade, que suena
súper angelical. Es lo más bonita que suena su voz en todo el álbum, en incluso
realiza un amago de high note.
My love won’t let me down
(8’5/10. 4’5
de 5 estrellas): preciosa, una de mis preferidas. Única
balada en todo el disco, pero qué baladón. Tenía miedo de que me decepcionara
porque tenía puestas muchas esperanzas en la única balada del álbum, pero no
fue así. En la primera escucha le di un: 9’5. No obstante, no llega a
sobrecoger o a quitar el aliento. Me sorprende lo grave que suena la voz de Jade
en el primer estribillo, sin duda estiró los límites de su registro. No puedo
quedarme con una única sola parte de la canción, quizá con el falsete de Jesy o
la subida de Leigh, ambas casi al final de la canción. Habiéndola escuchando
muchas veces me he dado cuenta de que la cadencia de las estrofas es parecida a
la de Stay de Miley Cyrus.
Rendezvous
(7/10. 3’5 de 5 estrellas): el snippet o adelanto me gustó bastante y pensé que podía ser de las
que más me gustaran, como en LM5 me pasó con el snippet de Love a girl right. Al escucharla entera, me decepcionó
un poco, porque le falta alto de chispa o un clímax, pero me gusta. Hubiera
pegado muy buen un estribillo cantado solo por Jesy. A mucha gente le recuerda
a American boy de su anterior trabajo, pero a mí me recuerda quizá un poco a
Motivate, también de LM5 y podía
haber estado perfectamente en ese disco. En la primera escucha le di un: 6’5. Nuevamente,
la voz de Jade logra sorprenderme por una gravedad inusitada en ella.
If you want my love (7’5/10.
3’5 de 5 estrellas):
empieza bien, pero el estribillo es un poco simple por lo parado que es, por
ser más stripped down. Eso le hace
perder a la canción y fue la razón de que en una primera escucha fuera de las
que menos me gustaran (solo le di un 6). Sin embargo, al contrario de lo que
pueda parecer, es un grower, y va
enganchando cada vez más. Es de las que más han ganado para mí después. Quizá
me recuerda un poco a las canciones de principio de los 2000, lo que siempre es
un plus. Lo mejor es el último estribillo, porque tiene más caña y alguna
subida. Mi parte favorita es la subida de Jade cuando dice «You got to work»,
son esa voz rasgada tan sexy. Me encanta la versatilidad de Jade en esta
canción, la forma en la que pasa de sonar dulce a romper la voz. Asimismo, en
este tema encontramos lo más parecido a una subida de Perrie y de Jade.
Breathe
(7/10. 3’5 de 5 estrellas): las campanas del principio me sorprendieron.
El estribillo al principio no me convencía, pero es bonito y quizá sea lo mejor
de la canción. Contiene lo más cercano que tenemos a una subida de Perrie, que
aun así queda muy descafeinada. Su voz no se ha lucido nada en este disco. En
la primera escucha solo le di un: 6.
Ranking
de la más favorita a la menos favorita:
*He
sudado la gota gorda para hacer esta clasificación porque casi todas me gustan
por igual, así que está muy sujeto a cambios.
1-Happiness
2-My love won’t let you down
3-Break up song
4-Gloves up
5-Holiday
6-If you want my love
7-A Mess (Happy 4 u)
8-Sweet melody
9-Breathe
10-Rendezvous
11-Confetti
12-Not a pop song
13-Nothing but my feelings
También he intentado
aventurar cuál hubiera sido mi ranking allá por el 6 de noviembre, en base a
cómo las clasifiqué muy grosso modo
en la primera escucha:
1-My love won’t let you down
2-Happiness
3-Break up song
4-Holiday
5-Not a pop song
6-Sweet Melody
7-Rendezvous
8-Nothing but my feelings
9-Gloves up
10-Mess
11-Confetti
12-Breathe
13-If you want my love
Por último, un plus:
Cosas
que esperaba de Confetti antes de que
saliera:
-Notas altas de todas,
sobre todo de Perrie: no cumplido.
-Canciones empezadas
por Jade: me daré por conforme.
-Mensajes de self-love: también me daré por conforme.
-Baladas:
insuficientes, solo una aunque muy hermosa.
-No abuso del sonido
electrónico: bastante conforme.