Calificación: 7/10
No recuerdo exactamente cómo supe de
este libro pero sé que alguien me lo recomendó, puede incluso que fuera una
profesora. Le tenía ganas pero iban pasando los años y no lo leía y fui
perdiendo el interés.
Me lo iba a haber leído en marzo o abril
del 2023, cuando me dediqué a las lecturas feministas como celebración del 8M,
pero al final solo me dio tiempo a releer los que ya había leído antes, así que
lo pospuse para las lecturas feministas de marzo de 2024.
Lo empecé este último 8M, Día
Internacional de la Mujer. Lo he abordado con pocas ganas pero con expectación
porque había oído hablar muy bien de él.
Por falta de tiempo y sobre todo de
motivación, lo he estirado como un chicle y para mi exasperación he terminado tardando dos semanas y media en
terminarlo. Lo cierto es que es bastante breve y ameno, pero no me ha pillado
en un buen momento.
Mejora o empeora según el capítulo. Cada uno de ellos es una entrada del blog de la autora y aborda un tema distinto, por lo que los hay tanto muy interesantes y amenos como muy lentos y pesados.
Pensé que iba a tener un enfoque más
neutral e impersonal, centrándose más en el feminismo en sí y menos en la vida
de la autora, pero no me disgusta ese enfoque autobiográfico con anécdotas
personales. Es realista, no trata de edulcorarte las cosas y te hace sentir más
comprendido, menos fracasado.
No obstante, quizá en ocasiones si
hubiera echado en falta más reflexión teórica y menos repetición de desgracias
personales. Hurley se muestra enormemente sincera y se abre sobre su juventud,
sus años de penuria económica, su relación tóxica con su exnovio, su enfermedad
crónica y sus vicisitudes como autora de Ciencia Ficción, aunque en ocasiones
se recrea demasiado en las desgracias. Uno de los primeros capítulos, el que
narra su conversión en escritora desde su adolescencia, me hace pensar que yo
no tengo la misma pasión por escribir. Yo no estoy dispuesta a sacrificar tanto
como ella ni a sufrir tanto por conseguirlo.
La mayor parte del tiempo resulta
sencillo simpatizar e identificarse con ella, y tiene razón en gran parte de
sus reflexiones, pero a veces puede resultar muy radical, inflexible y algo contradictoria.
Por ejemplo, sostiene que no hay que
reprimir lo suave y femenino, que aporta equilibrio al mundo y que es la muy
necesaria otra cara de la moneda, pero critica personajes que muestran esta
ambivalencia, y, en función de lo que ella misma describe, los personaje que
ella crea para sus obras parecen ceñirse al patrón de “borrachas asesinas sin
sentimientos” que tampoco son fiel reflejo de la mujer real.
Sus críticas a Buffy cazavampiros, Jurassic World y Guardianes de la Galaxia son exageradas, injustas, irreales y
desproporcionadas. ¡Si Buffy es todo un icono feminista!
Sin duda es una lectura que merece
la pena y la recomiendo a cualquier persona que quiera seguir cultivándose
sobre feminismo, aunque cogiendo algunas reflexiones “con pinzas” y
permitiéndose no aceptar todas sus asunciones como la verdad absoluta.
Fuente de la imagen de la portada (las fotos del interior son mías):
https://www.google.com/url?sa=i&url=https%3A%2F%2Fwww.alianzaeditorial.es%2Flibro%2Frunas%2Fla-revolucion-feminista-geek-kameron-hurley-9788491810148%2F&psig=AOvVaw32aM0dddkgD5CQn7gEpMko&ust=1712000775918000&source=images&cd=vfe&opi=89978449&ved=0CBIQjRxqFwoTCODs14Kin4UDFQAAAAAdAAAAABAE
Hola!!
ResponderEliminarInteresante, muchas veces las contradicciones son una locura y no sostemos el discurso en muchos aspectos. Gracias por la reseña y hablar de los puntos malos de la lectura.
Besos💋💋💋