viernes, 24 de junio de 2022

Reseña de "Emma" (1815) de Jane Austen

Calificación: 7/10. 3 estrellas de 5.

Emma (1815) es el único libro de Jane Austen del que ya me había visto la película —la del 2020— antes de leerme el libro. Afortunadamente, mi mala memoria me ha salvado de hacer una lectura completamente desprovista de alicientes o sorpresas, a pesar de que sí recordaba con bastante certeza quienes lograban ganarse el corazón de Emma y Harriet al final de la historia.

Lo cierto es que se me ha hecho un poco largo. Su lectura me ocupó un total de diez días. Las mejores partes son el principio y el final siendo el medio del libro lo que se hace un poquito más pesado. No es un libro aburrido en absoluto, pero lo esperaba más divertido y cómico que sus otras novelas. No sé si es que el ingenio de Jane Austen no está tan presente como en otras o es que ya me he acostumbrado tanto a él que ya no me asombra.

Emma, aunque no sea mala persona, es egoísta, manipuladora, y superficial.  Más allá de su manía de arreglar la vida de los demás o de creer que siempre está en posesión de la verdad, lo que más me molesta de ella es su obsesión por las clases sociales y la importancia que les concede en el matrimonio. Me horrorizó cuando le dijo a Harriet que si se casaba con Martin ya no podrían ser amigas porque no podía dejarse ver en público con la esposa de un simple granjero. Harriet parece más inocente y buena que en la película y en el libro nunca recrimina a Emma sus actos, pero tiene poca personalidad y nulo criterio propio, lo que la hace muy manipulable.

El Sr. Knightley me cae bien porque es el único que no le hace la pelota y pone en su sitio a Emma. Recelé ligeramente de él porque parecía ocultar algo y se empeñaba demasiado en defender a Jane Fairfax. [SPOILER: Mi teoría de que tenía tan atravesado a Frank por celos porque pensaba que él y Emma se gustaban resultó ser cierta. Sin ser un hombre por el que yo beba los vientos, me ganó cuando invitó a bailar a Harriet al contemplar lo sola que estaba y el desplante que le había hecho el señor Elthon.]

El padre de Emma, el señor Woodhouse, a veces se me hacía un tanto insufrible. Aunque no sea mala persona, es paranoico y miedoso hasta unos extremos realmente paródicos, que tanto te divierten como te pueden cansar. Lo mismo pasa con la señora Bates, que sin duda es una parodia o caricatura en sí misma. Pero, admitámoslo, ¿no hemos conocido todos a varias personas así de cansinas, que solo quieren hablar ellas durante horas y no dejar hablar a los demás?

En cierto modo podría considerarse una comedia de enredos y el atractivo de la obra reside en las estratagemas que Emma prepara para “arreglar” la vida amorosa de Harriet y los equívocos y malentendidos que van surgiendo como consecuencia. Múltiples posibles parejas van siendo sugeridas como posibles ante tus ojos. [SPOILER: Que Emma se va a quedar con el Sr. Knightley se ve venir casi desde el principio. En cuanto a Harriet me sonaba por la película que se quedaba con el granjero, aunque admito que luego me planteé la posibilidad de que se quedara con Frank Churchill. A raíz de la escena del tan esperado baile, se me ocurrió que quizá Frank y Jane iban a acabar juntos pero el posterior juego de las letras en casa de Emma me desconcertó porque no pareció haber mucha cordialidad entre ellos.]

Lo mejor ha sido el final. Algo que prefiero de este libro en relación a otros de Jane Austen es que el desenlace no se siente tan abrupto y apresurado, contándote que se casaron en las últimas páginas y sin darte muchos detalles. Aquí, afortunadamente, se recrea un poco más en exponerte cuáles fueron las reacciones al compromiso, cuándo se celebró la boda, mostrándote escenas de ellos como prometidos, etc. En este aspecto es incluso un poquito superior a Orgullo y prejuicio, ¡pero solo en este! También, George Knightley, aunque no sea el señor Darcy, te va ganando y para cuando está terminando el libro ya me tenía conquistada. Menos mal que la propia Emma era consciente de que no le merecía.

En cuanto a las películas, recomiendo sobre todo la de 1996 con Gwyneth Paltrow, que no la había visto antes y me ha encantado (quizá sea mi favorita de todas las adaptaciones cinematográficas de novelas de Jane). Además de ser entrañable y divertida, es muy fiel al libro. La versión de 2020 con Anya Taylor-Joy, que he vuelto a ver de nuevo, es menos fiel pero también recomendable y entretenida.

 

1 comentario:

  1. Hola!!
    El principio es pesado y aburre mucho pero se ahí me gustó mucho este libro, es uno de mis favoritos.
    Besos💋💋💋

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